Hacia una España Mejor

martes, diciembre 03, 2013

Expertos en Derecho

Manifiesta el dicho: “Hay tontos que tontos nacen y tontos que tontos son y tontos que tontos hacen a los que tontos no son”. Recuerdo esta frase simplemente a modo de reflexión y sin la más mínima intención de aludir a nadie aunque soy consciente de que alguien se puede dar por aludido. Desde que el pasado 25 de noviembre se hiciera pública la sentencia condenando a Carlos Fabra a cuatro años de prisión hemos asistido a la contemplación de una serie de manifestaciones tanto del propio delincuente como de otros que se han manifestado a su favor en un intento por negar la evidencia y sobre todo la realidad de las cosas, que nos han dejado boquiabiertos tanto por su incoherencia como por su descarada falta de respeto a la inteligencia de los españoles. Manifestaciones que nos han llevado a la conclusión de que estamos en manos de incompetentes impresentables que ponen en serio peligro la credibilidad que nos puedan merecer algunos, bastantes, políticos. Nos encontramos ante el frontispicio de las calamidades que nos pueden afectar si aceptamos que determinados sujetos que son licenciados en Derecho o bien doctores en Derecho, emitan su parecer sobre la condena impuesta al que fuera durante 16 años presidente de la Diputación de Castellón y que ha sido condenado por defraudar a Hacienda y por tanto a todos los españoles, en un intento por desvirtuar la realidad de un hecho sobradamente demostrado. Tanto María Dolores de Cospedal, licenciada en Derecho, como Carlos Floriano, doctor en Derecho, han intentado quitarle hierro a la condena diciendo que se debe de respetar la presunción de inocencia de Carlos Fabra ya que la sentencia no es firme, decir esto dos personas con dichas titulaciones, es algo que causa verdadera risa y que ha despertado sobre todo en muchos licenciados en Derecho un cierto “recochineo”. Hasta el tonto del pueblo sabe que la condena “va a misa” y que el señalar que la misma “no es firme” no tiene otro objeto que el de conceder al condenado el derecho a recurrir la sentencia. Carlos Fabra ha sido condenado por cometer un acto delictivo y con esto acaba la presunción de inocencia. La verdad es que no entiendo como dos personas con tales titulaciones se prestan a hacer el más espantoso de los ridículos. Yo creo que hasta los que fueron sus profesores habrán sentido vergüenza ajena. Pero yo no sé si esto se hace de forma malintencionada o por pura ignorancia, si fuera por esto último hay motivos más que sobrados para que se nos pongan los pelos como escarpias con solo pensar que por esas cosas raras que tiene la política estos individuos puedan tener responsabilidades de gobierno o de proyectar y aprobar leyes aunque tenemos el caso de María Dolores de Cospedal que a más de ser secretaria general del PP es también presidenta de la Junta de Castilla-La Mancha, comunidad autónoma que está hecha unos zorros, principalmente su sistema sanitario público, y que dijo aquello de que Bárcenas tenía “un contrato ficticio” y que había cobrado por su despido “una indemnización en diferido” algo que ni tan siquiera figura en ese diabólico documento conocido como la Reforma Laboral de Rajoy. Un invento de la “ilustre” letrada. Y no digamos si Carlos Floriano pudiera acceder a ocupar un ministerio y que este fuera el de Interior o Justicia. Este no menos “ilustre” es el mismo que dijo aquello de que “la libertad de información debe tener límites”. Caray con el doctor en Derecho. ¿Qué nivel político tenemos en este país cuando gente entendida en leyes, se supone, dicen tamaños desatinos? Está claro que con este tipo de políticos no vamos ni a la puerta de la calle. Finalmente decir que en lo que respecta a Luís Bárcenas que hasta ahora no ha tenido juicio alguno y por tanto no ha sido condenado y no obstante en el Partido Popular lo tachan de de delincuente y sin embargo para Carlos Fabra, juzgado y condenado, piden la presunción de inocencia. De momento Bárcenas es un presunto y Fabra un delincuente. Creo que esto lo tenemos todos muy claro. Salvo, por lo dicho por ellos, estos dos “expertos” en Derecho.