Hacia una España Mejor

viernes, noviembre 12, 2010

Ya es oficial


En la miniserie que sobre la vida de Adolfo Suárez, emitió una emisora de TV, tuvimos ocasión de escuchar una frase que como respuesta a Fernando Abril Martorell, al plantearle este último, creo que fue con motivo de la intención de hacer efectiva una ley que regulara el divorcio, que no tenía necesidad de meterse en un asunto que podría enfadar a mucha gente, a lo cual Suarez le respondió que se trataba de hacer oficial algo que en la calle ya era normal.
Lo dicho anteriormente viene a colación porque esas listas de espera en Sanidad sobre las que tanto hemos protestado y seguimos protestando, todos, van a ser reguladas y hechas oficiales dentro de poco tiempo. En su última actuación como ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, reunida con los consejeros de Sanidad autonómicos, salvo los de Murcia, Valencia, Ceuta y Melilla, han acordado que una de las decisiones a adoptar en la próxima reunión en Palma del Consejo Interterritorial de Salud será la de fijar en 180 días, seis meses, como tiempo máximo de espera para determinadas intervenciones sin las que el paciente corra riesgo de muerte o sufra una incapacidad severa. Todo esto se refiere a la cirugía cardiaca. O sea, que si te pones malito, muy malito, como fue mi caso, a lo mejor te operan de inmediato. Por otro lado en todas las regiones de España se va a garantizar que antes de seis meses se operará de cataratas y los implantes de prótesis de caderas y de rodilla. Lo cual me lleva a la conclusión de que cuando cualquiera de nosotros lleve dos o tres meses de espera y vaya a reclamar le responderán que menos prisas, que aún puede usted esperar, pasándolas canutas, tres o cuatro meses más. Como se puede ver se piensa hacer oficial lo que en la calle ya es normal. Al final nos acostumbramos a todo, hasta a lo más malo. Hay dos frases que lo definen muy bien, una es de Simone de Beauvoir, que dice: “Lo más escandaloso que tiene el escándalo, es que uno se acostumbra”. Y la otra cuyo autor es Jean Paul Sartre, que manifiesta que “Lo más aburrido del mal es que a uno lo acostumbra”.
Quiero aclarar que no me ha causado ninguna extrañeza que no acudiera a esa reunión con la ex ministra de Sanidad y hoy ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, el consejero de Sanidad de la Comunidad Valenciana, porque en esta Comunidad lo de los seis meses es algo imposible de conseguir, hasta tal punto que en cardiología los cosa de la espera supera ya lo siete meses y el resto va por el mismo camino.
Ante tal perspectiva y como dijo Jean de la Bruyere: “Conviene reír sin esperar a ser dichoso, no sea que nos sorprenda la muerte sin haber reído”.