Hacia una España Mejor

viernes, abril 30, 2010

Hay comisiones y plusvalías


Con todo esto del caso Gürtel conviene deja claro que es lo que son los pagos por comisiones a políticos por adjudicaciones de obras o servicios a las empresas y aquello que muchos creen que son comisiones pero que en realidad no se trata más de una mera operación de compraventa en la que el vendedor suele obtener un beneficio.
Las comisiones son aquellas en las que se infla el precio de la contrata para después pasarle la correspondiente comisión al político de turno. Esto es, pagar una comisión con el dinero del contribuyente, dinero que si no se utilizara para estas prácticas corruptas serviría para dar una mejor atención a los ciudadanos en todos los órdenes sociales y en lo que concierne a infraestructuras, por ejemplo: para construir carreteras.
Luego están lo que algunos consideran comisiones, que, repito, no son más que una transacción normal, con esto que voy a exponer no doy pistas a nadie para que actúe de esta forma ya que este tipo de operaciones ya se ha puesto en práctica en algún municipio. Se trata sencillamente de que si una empresa constructora a la que se le han recalificado varios terrenos en un mismo municipio para poder construir, decide comprar unos terrenos que da la coincidencia de que son propiedad del alcalde del ayuntamiento que en su día aprobó cambiar el uso de unos terrenos, pongo el ejemplo de un alcalde que compró unos terrenos calificados para uso agrícola y por tanto su precio era muy barato y posteriormente la empresa en cuestión le compra esos terrenos, aún sin recalificar y por tanto siguen siendo de uso agrícola, al alcalde, con lo cual el primer edil obtiene un beneficio legal por esta compraventa de varios cientos de millones de pesetas. Alguien podrá pensar, siempre hay gente maliciosa, que esto supone el pago encubierto de una comisión. Nada más lejos de la realidad. Estamos en una sociedad libre y por tanto es esa libertad la que legitima a todos los ciudadanos a que paguen por la adquisición de cualquier bien, en este caso por compra de terrenos, lo que le venga en gana. Si ya sé que el comprador puede pasar por tonto al adquirir una cosa muy por encima de su valor real, pero como antes he dicho cada cual puede hacer con su dinero lo que mejor le parezca. Por poder puede hasta regalarlo.
Creo que con esto he dejado bien claro lo que es el pago o el cobro, según le toque a cada cual, de comisiones y lo que es el resultado de una operación de compraventa. Esto no se puede calificar de comisión ya que en realidad se trata, sencilla y llanamente, de que el beneficiado ha sabido comprar bien y vender mejor para de ese modo obtener unas opíparas plusvalías. Es así, no le dé usted más vueltas. No hay nada raro detrás de todo esto. Salvo lo que puedan cavilar los malpensados. Que de todo hay en la viña del Señor. Es verdad, de todo hay.