Hacia una España Mejor

miércoles, noviembre 01, 2006

DEL MENUDEO AL POR MAYOR


La corrupción comenzó a manifestarse en el PP después de que este partido ganara, allá por 1996 las elecciones generales, de forma muy poco llamativa. Se podría decir que más que a cometer actos de corrupción a gran escala se dedicaron al menudeo. Si damos un repaso por la historia más reciente veremos como al que fuera líder de la derecha en tierras canarias, José Manuel Bravo de Laguna, le pillan con las manos en la masa, un pijama de seda que pretendía sacar, sin pasar por caja, de unos grandes almacenes londinenses. La Sala Segunda del Tribunal Supremo condenaba al diputado del PP José Antoliano Bermúdez Alonso, a dos años de inhabilitación para la profesión de abogado, como autor de un delito de deslealtad profesional cuando de forma unilateral “retenía” una indemnización de dos millones de pesetas que pertenecía a sus clientes por motivo de un accidente de tráfico mortal. Un concejal de Cádiz, del PP, Francisco Villarreal utilizó dinero de la Afanas, una asociación dedicada a la atención de disminuidos psíquicos, para gastos personales como la compra de una cocina para su domicilio. El propio Villarreal reconoció haber utilizado 600.000 pesetas de la asociación para comprar dicha cocina matizando que esto era una práctica normal y que estaba prevista la devolución del dinero. Cuando abandonó el cargo en la asociación aún debía 540.000 pesetas. Y para no hacer esta lista más larga señalar que Rosendo Naseiro, ¿se acuerda de él? fue pillado “infraganti” por la Guardería Rural, Policía Local y Guardia Civil, cuando robaba diez quilos de uva en una finca de Monforte del Cid (Alicante). En esos momentos Naseiro, conducía un BMW de 17 millones de pesetas en cuyo maletero llevaba varios cuadros y objetos de arte del año 1800. Naseiro, dijo a los agentes policiales que los había adquirido a través de Internet. Estos casos se dieron entre los años 1998 y 2000.
Como usted puede observar comenzaron al menudeo. Después ampliaron el campo de operaciones hasta que hemos llegado a lo de la familia de Esperanza Aguirre, y al de otros puntos en la geografía española de los que destaca el “desmadre” de la Comunidad Valenciana con los alcaldes de Alicante, Orihuela y Torrevieja a más del presidente de la Diputación Provincial de Castellón, imputados por los jueces por cuestiones de “interesantes” operaciones inmobiliarias, enriquecimientos muy “llamativos” y “extrañas operaciones financieras” en sociedades de ámbito municipal. A esto le llamo yo “progresión económica” cuyas pautas a seguir para su consecución no figuran en los libros de texto que tratan sobre economía, ni tampoco en los que uno puede aprender a dirigir empresas. Vamos, que no es una enseñanza reglada de rango universitario. Estos no son los hermanos Marx, que comenzaron de la nada y estaban en la miseria. Estos comenzaron de la nada y sus signos externos, sus “cosas raras”, no muestran signo alguno de miseria.