Hacia una España Mejor

jueves, junio 01, 2006

EL MAL HUMOR DE ORTUÑO



La gente se pregunta que porque está Manuel Ortuño, tan rebotado últimamente y porque observa esa actitud tan beligerante con el Gobierno local, postura la suya que se refleja en las mociones escritas por él y firmadas y presentadas en al ayuntamiento por sus peones de confianza Bonet, Navarro y Dobón, tres "ilustres" incapaces de hilvanar una frase que pueda expresar algo medianamente coherente. De ahí que Ortuño tenga que hacerlo por ellos.
Yo considero que la actitud de Ortuño es perfectamente comprensible. Ese estigma que se identifica tanto con el prefijo "ex" es el que provoca esta reacción de Ortuño. Recordemos que de ser militante, presidente local, concejal, diputado autonómico y subdelegado del Consell en Elche ha pasado, de forma traumática, a ser ex militante, ex presidente, ex concejal, ex diputado y ex subdelegado del Consell, y claro esto, forzosamente pone de los nervios a cualquiera. Eso de que le echen a uno de todos los sitios, como le ha sucedido a él, debe ser muy duro. Por nadie que pase.
Si a todo eso le añadimos que a lo largo de su actividad política ha sido condenado por la Justicia en más de una ocasión, la última vez, de momento, como consecuencia de la denuncia interpuesta contra él por su "compañera" de partido Enriqueta Seller, la cosa es para estar cabreado, fastidiado y más. Todo ello provoca el que intente desahogarse y quitarse el enfado arremetiendo contra el primero que se lo pone delante. Para colmo de sus desdichas, las desgracias nunca vienen solas, ha tenido que pagar unos cuantos miles de euros, para evitar una sentencia condenatoria más, en concepto de indemnización a las víctimas en un accidente de circulación en el cual se vio involucrado y que al parecer él era el que no tenía la razón y que además la cosa se agravaba porque el coche que él conducía tenía el seguro prescrito y su carnet de conducir caducado.
La verdad es que de Ortuño, se puede decir que políticamente empezó de la nada y hoy está en la miseria.